¿Cómo se realiza un análisis cromosómico?
Un análisis cromosómico se realiza obteniendo una muestra de células, que pueden ser de sangre, médula ósea u otro tejido. Las células se cultivan y luego se detienen en la mitosis. Posteriormente, se tiñen los cromosomas y se examinan bajo un microscopio para identificar anomalías estructurales o numéricas.
¿Cuál es la finalidad de un análisis cromosómico?
La finalidad de un análisis cromosómico es identificar alteraciones en el número o estructura de los cromosomas, lo que puede ayudar en el diagnóstico de condiciones genéticas, evaluar el riesgo de enfermedades hereditarias y guiar decisiones médicas en relación con el desarrollo y tratamiento de trastornos genéticos.
¿Qué enfermedades se pueden detectar con un análisis cromosómico?
Un análisis cromosómico puede detectar enfermedades y condiciones genéticas como el síndrome de Down, síndrome de Turner, síndrome de Klinefelter, trisomía 18 (síndrome de Edwards), trisomía 13 (síndrome de Patau) y algunas translocaciones que podrían asociarse a ciertos tipos de cáncer o infertilidad.
¿Qué preparación se necesita antes de un análisis cromosómico?
Antes de un análisis cromosómico, generalmente se requiere extraer una muestra de sangre, médula ósea o tejido. El paciente debe evitar ciertos medicamentos que puedan afectar el crecimiento celular. Es posible que deba dieron indicaciones para ayuno u otras preparaciones específicas. La muestra se cultiva para obtener células en metafase.
¿Qué muestras se utilizan para realizar un análisis cromosómico?
Para realizar un análisis cromosómico, se utilizan muestras de sangre periférica, médula ósea, líquido amniótico, vellosidades coriónicas, tejidos fetales o muestras de tumores. La elección depende de la condición que se investiga y la etapa del desarrollo del individuo.