Huella de carbono

Cómo calcular la huella de carbono

La huella de carbono se calcula sumando la suma a lo largo de la vida de todas las emisiones de gases de efecto invernadero de una entidad determinada.

Teniendo en cuenta las diferencias de PCA (potencial de calentamiento global) de cada gas, podemos estimar la huella de carbono de una entidad en_CO2e(equivalentes de dióxido de carbono). El_CO2ees mucho más preciso que medir el_CO2 porque tiene en cuenta todos los gases de efecto invernadero, no sólo_{el CO2}. Se pueden utilizar varios sitios web para estimar tu propia huella de carbono, incluido éste proporcionado por la Agencia de Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos.

Causas de la huella de carbono

Existen numerosas causas del aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, como la quema de combustibles fósiles, las prácticas agrícolas, la ganadería y otras. A continuación repasaremos estas causas con más detalle.

Huella de carbono de los alimentos

A nivel mundial, la ganadería contribuye anualmente con aproximadamente 7,1 gigatoneladas de_CO2 a la atmósfera, siendo la carne de vacuno la que más contribuye (Fig. 1) (Tabla 1). La mayor parte de estas emisiones proceden de dos fuentes: la conversión de la tierra/destrucción del hábitat para dejar sitio al pastoreo del ganado, y de los flatos del ganado. En cuanto a los patrones dietéticos, se ha descubierto que, como era de esperar, las personas que comen una gran cantidad de carne son las que más_CO2edietético aportan diariamente, con más de 7 kg_{de CO2e}, y los veganos los que menos, con menos de 3 kg_{de CO2e}.

Tabla 1: Alimentos por kg de_CO2epor kg de alimento.

Huella de carbono de los vehículos (incluidos los coches eléctricos)

Los vehículos aportan una cantidad muy grande de gases de efecto invernadero a la atmósfera, aunque la cantidad aportada difiere según el tipo de vehículo conducido y el tipo de combustible utilizado. Se calcula que un vehículo medio produce ¡4,6 toneladas de_CO2 al año! En la Unión Europea, más del 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de vehículos proceden de los coches, seguidos de los camiones pesados de mayor tamaño, con más del 25%. La contribución más baja procede de las motocicletas, con un mero 1% del total de las emisiones vehiculares.

Los coches eléctricos pueden reducir drásticamente la huella de carbono de los vehículos, pero no la eliminan por completo. En EE.UU., por ejemplo, se descubrió que el uso exclusivo de un coche eléctrico produce algo más de un tercio de las emisiones de_CO2eque las generadas por un vehículo de gasolina (Tabla 2).

Otra forma de desplazamiento en vehículo que tiene un gran impacto en tu huella de carbono es el viaje en avión. De hecho, para las personas que viajan en avión con frecuencia, es probable que la mayor contribución a su huella de carbono individual (al margen de si deciden tener hijos o no, sobre lo que hablaremos más adelante) esté relacionada con el viaje en avión. Sin embargo, a escala mundial, los viajes en avión sólo suponen alrededor del 2,5% de la huella de carbono total. Esto se debe en gran medida a las desigualdades económicas que hacen que la mayoría de los seres humanos no puedan permitirse viajar frecuentemente en avión.

Tabla 2: Emisiones de_CO2epor tipo de vehículo en EE.UU.

La huella de carbono de los correos electrónicos

Puede que no pensemos a menudo en ello, pero los aparatos electrónicos que utilizamos a diario producen gases de efecto invernadero. Desde los hornos eléctricos a las consolas de videojuegos, ¡e incluso Internet! El uso residencial de electricidad contribuye significativamente a las_{emisiones de CO2e}en los países desarrollados, sobre todo la electricidad utilizada para alimentar el control climático interior en forma de refrigeración y calefacción.

Incluso el uso de un smartphone contribuye a tu huella de carbono, principalmente debido a su fabricación, y no tanto a su uso real. Lo mismo ocurre con los ordenadores portátiles, de los que casi el 80% del_CO2eprocede de su fabricación y sólo el 20% de su uso en una media de tres años. Quizás una de las fuentes más sorprendentes de_CO2esea el uso del correo electrónico. Sí, ¡cada correo electrónico que envías lleva "adjunta" una cantidad de_CO2e(aunque sea extremadamente pequeña)! Se calcula que los correos electrónicos individuales aportan entre 0,03 gramos y 26 gramos de_CO2e, lo cual es muy pequeño. Sin embargo, dado que cada año se envían más de 300 BILLONES de correos electrónicos de unos 4.000 millones de usuarios de Internet, la cantidad aportada es mucho mayor de lo que cabría esperar. Sin embargo, incluso a este nivel, la contribución del correo electrónico al total mundial de_CO2ees ínfima, ya que se sitúa muy por debajo de la mitad de un único porcentaje, y el uso del correo electrónico es muy superior al envío de correo físico en términos de huella de carbono.

Huella de carbono media en el Reino Unido

A escala mundial, el_CO2eantropogénico asciende a unas 50 gigatoneladas anuales y el ciudadano medio contribuye con 6,5 toneladas a ese total. El ciudadano medio del Reino Unido contribuye con unas 6,8 toneladas anuales, por lo que es ligeramente superior a la media mundial. Los ciudadanos de Estados Unidos contribuyen con una media de 18,4 toneladas por persona, mientras que los ciudadanos de Brunei son los que más contribuyen, con unas 38,8 toneladas (Tabla 3).

En términos de emisiones totales, y no por persona, China tiene con mucho la mayor huella de carbono, con 11,7 gigatoneladas de_CO2eanuales, seguida de Estados Unidos, con 5,8 gigatoneladas, e India, con 3,4 gigatoneladas. Combinados, estos tres países representan más de la mitad de todo el_CO2eemitido en el mundo (Tabla 4). Mucho más abajo en la lista se encuentra el Reino Unido, con unas 0,4 gigatoneladas de_CO2e.

Tabla 3: Países por toneladas de_CO2epor persona.

Tabla 4: Países por gigatoneladas de_CO2e.

Ejemplos de Huella de Carbono

Dado que estudiar la huella de carbono total de un individuo lleva mucho tiempo e implica más variables de las que podemos proporcionar aquí sin que resulte demasiado complejo, veamos en su lugar los viajes anuales de cinco individuos diferentes.

Viajero nº 1: 12,55 toneladas_{de CO2e}anuales

Viajero nº 2: 22,47 toneladas_de CO2eanuales

Viajero nº 3: 16 toneladas_deCO2e anuales

Viajero nº 4: 6,35 toneladas_deCO2e anuales

Viajero nº 5 46,6 toneladas_deCO2e anuales

¿Has acertado? Como puedes ver, los viajes en clase preferente, combinados con un trabajo que requiere desplazamientos frecuentes, aumentan significativamente la huella de carbono de una persona. Además, puedes observar que el trabajo a distancia disminuye significativamente los niveles, incluso para una persona que tomó un vuelo de ida y vuelta muy largo (¡de EE.UU. a Australia!) Esto puede hacerte pensar en el impacto positivo que ha tenido sobre el medio ambiente la popularidad del trabajo exclusivamente a distancia tras la epidemia del COVID-19.

¿Cómo podemos reducir nuestra huella de carbono?

Hay varias cosas que una persona puede hacer para reducir su huella de carbono.

Como se ha mostrado anteriormente, los vehículos que conduces y los alimentos que comes tienen un gran impacto en las emisiones de gases de efecto invernadero. Cambiar a un vehículo híbrido o eléctrico puede ayudar en cierta medida, aunque es mucho mejor optar por utilizar el transporte público y evitar por completo la propiedad de un vehículo. Ten en cuenta que cambiar de vehículo cuando tu viejo coche aún funciona (¡y es seguro!) aumenta significativamente las emisiones de efecto invernadero, ya que_{las emisiones de CO2e}de la fabricación de automóviles son realmente elevadas.

En cuanto a la dieta, cuanto menos cárnica sea tu alimentación, mejor. Decidir eliminar por completo la carne de vacuno de tu dieta puede ser especialmente útil, aunque lo mejor es seguir una dieta vegana totalmente basada en plantas.

Otras cosas que puedes hacer para reducir tu huella de carbono en relación con la alimentación son comer alimentos de temporada, sobre todo regionales, ya que así evitas el_CO2edel transporte de alimentos a larga distancia.

Además, también puedes intentar evitar los vuelos demasiado largos (como los transatlánticos), utilizar formas de energía más sostenibles (como la solar), reciclar, calentar la casa en invierno a una temperatura ligeramente inferior, ducharte con agua más fría, secar la ropa al aire, etc.

Esperamos que ahora sepas más sobre la huella de carbono. ¡Quizá incluso puedas calcular la tuya!