¿Cómo se calcula la base imponible en el impuesto sobre sociedades?
La base imponible en el impuesto sobre sociedades se calcula sumando los ingresos menos los gastos deducibles en el ejercicio fiscal. A esto se le aplican ajustes extracontables, como diferencias temporales o permanentes, según la normativa fiscal vigente, para obtener la base imponible final sujeta a tributación.
¿Cuál es la diferencia entre base imponible y base liquidable?
La base imponible es el total sobre el cual se calculan los impuestos, reflejando los ingresos o patrimonio antes de deducciones. La base liquidable se obtiene restando de la base imponible las reducciones o deducciones permitidas, siendo la cantidad efectiva sobre la que se aplica el tipo impositivo.
¿Qué factores pueden afectar el cálculo de la base imponible?
Los factores que pueden afectar el cálculo de la base imponible incluyen deducciones fiscales, exenciones aplicables, ingresos percibidos y gastos deducibles. Cada jurisdicción puede tener reglas específicas sobre qué elementos se pueden incluir o excluir en el cálculo, lo que puede afectar el importe final.
¿Cómo se puede reducir legalmente la base imponible de una empresa?
Para reducir legalmente la base imponible de una empresa, se pueden deducir gastos operativos justificables, aprovechar incentivos fiscales y deducciones, realizar aportaciones a planes de pensiones de empleados, y utilizar pérdidas fiscales de ejercicios anteriores. También es útil asegurarse de que se está aplicando correctamente la amortización de activos.
¿La base imponible incluye ingresos no operativos?
Sí, la base imponible puede incluir ingresos no operativos, como son intereses, dividendos o ganancias por venta de activos. Estos ingresos son parte del cálculo total de la renta sujeta a impuestos, dependiendo de las normativas fiscales aplicables.