Gasto del consumidor

Ejemplos de gasto de los consumidores

Hay tres categorías de gasto de los consumidores: bienes duraderos, bienes no duraderos y servicios. Los bienes duraderos son cosas que duran mucho tiempo, como televisores, ordenadores, teléfonos móviles, coches y bicicletas. Los bienes no duraderos son cosas que no duran mucho, como la comida, el combustible y la ropa. Los servicios incluyen cosas como un corte de pelo, fontanería, reparación de televisores, reparación de automóviles, atención médica, planificación financiera, conciertos, viajes y jardinería. En pocas palabras, los bienes se te dan a cambio de tu dinero, mientras que los servicios se hacen para ti a cambio de tu dinero.

Fig. 1 - OrdenadorFig. 2 - Lavadora Fig. 3 - Coche

Podría pensarse que una casa es un bien duradero, pero no es así. Aunque la compra de una casa sea para uso personal, en realidad se considera una inversión y se incluye en la categoría de Inversión Fija Residencial a efectos del cálculo del Producto Interior Bruto en Estados Unidos.

Un ordenador se considera gasto de consumo si se compra para uso personal. Sin embargo, si se compra para utilizarlo en una empresa, se considera una inversión. En general, si un bien no se utiliza posteriormente en la producción de otro bien o servicio, la compra de ese bien se considera gasto de consumo. En Estados Unidos, cuando una persona compra un bien que se utiliza con fines empresariales, a menudo puede deducir esos gastos al presentar su declaración de la renta, lo que puede contribuir a reducir su factura fiscal.

Gasto de los consumidores y PIB

En Estados Unidos, el gasto de los consumidores es el mayor componente de la economía, también denominado Producto Interior Bruto (PIB), que es la suma de todos los bienes y servicios finales producidos en el país, dada por la siguiente ecuación:

$$\begin{gathered} GDP=C+I+G+NX \\ Where: \\ C=Consumption \\ I=Investment \\ G=GovernmentSpending \\ NX=NetExports(Exports-Imports) \end{gathered}$$

Dado que el gasto de los consumidores representa alrededor del 70% del PIB en Estados Unidos^,1 está claro que es muy importante vigilar las tendencias del gasto de los consumidores.

Por ello, el Conference Board, una agencia gubernamental estadounidense que recopila todo tipo de datos económicos, incluye los nuevos pedidos de bienes de consumo de los fabricantes en su Índice de Indicadores Económicos Principales, que es una recopilación de indicadores que se utiliza para intentar predecir el futuro crecimiento económico. Así pues, el gasto de los consumidores no sólo es un enorme componente de la economía, sino que también es un factor clave para determinar lo fuerte que puede ser el crecimiento económico en un futuro próximo.

Ejemplo de cálculo del gasto de los consumidores

Podemos calcular el gasto de los consumidores de dos maneras.

Podemos obtener el gasto del consumidor reordenando la ecuación del PIB:C = PIB - I - G - NXDonde:C = Gasto del ConsumidorPIB = Producto Interior BrutoI = Gasto de InversiónG = Gasto del GobiernoNX = Exportaciones Netas (Exportaciones - Importaciones)

Alternativamente, el gasto de los consumidores puede aproximarse sumando las tres categorías de gasto de los consumidores:C = DG + NG + SDonde:C = Gasto de los consumidoresDG = Gasto en bienes duraderosNG = Gasto en bienes no duraderosS = Gasto en servicios

Impacto de la recesión en el gasto de los consumidores

El impacto de una recesión en el gasto de los consumidores puede variar mucho. Todas las recesiones se producen por un desequilibrio entre la oferta agregada y la demanda agregada. Sin embargo, la causa de una recesión puede determinar a menudo su impacto en el gasto de los consumidores. Examinémoslo más detenidamente.

Gasto de los consumidores: La demanda crece más rápido que la oferta

Si la demanda crece más deprisa que la oferta -un desplazamiento hacia la derecha de la curva de demanda agregada- los precios subirán, como puedes ver en la Figura 4. Al final, los precios suben tanto que el gasto de los consumidores se ralentiza o disminuye.

Fig. 4 - Desplazamiento hacia la derecha de la demanda agregada

Gasto de los consumidores: La oferta crece más rápido que la demanda

Si la oferta crece más deprisa que la demanda -un desplazamiento hacia la derecha de la curva de oferta agregada- los precios tienden a mantenerse bastante estables o a bajar, como puedes ver en la Figura 5. Con el tiempo, la oferta aumenta tanto que las empresas tienen que ralentizar la contratación o directamente despedir a empleados. Con el tiempo, esto puede provocar un descenso del gasto de los consumidores, ya que las expectativas de ingresos personales caen debido al miedo a la pérdida de empleo.

Fig. 5 - Desplazamiento de la oferta agregada hacia la derecha

Gasto de los consumidores: La demanda cae más rápido que la oferta

Ahora bien, si la demanda cae más rápido que la oferta -un desplazamiento hacia la izquierda de la curva de demanda agregada- puede deberse a un descenso del gasto de consumo o del gasto de inversión, como puedes ver en la Figura 6. Si es lo primero, entonces el estado de ánimo de los consumidores puede ser en realidad la causa, y no la consecuencia, de una recesión. Si es lo segundo, el gasto de los consumidores probablemente se ralentizará, ya que un descenso del gasto de inversión suele provocar un descenso del gasto de los consumidores.

Fig. 6 - Desplazamiento de la demanda agregada hacia la izquierda

Gasto de los consumidores: La oferta cae más rápido que la demanda

Por último, si la oferta cae más rápido que la demanda -un desplazamiento hacia la izquierda de la curva de oferta agregada-, los precios subirán, como puedes ver en la Figura 7. Si los precios suben lentamente, el gasto de los consumidores puede ralentizarse. Sin embargo, si los precios suben rápidamente, en realidad podría provocar un mayor gasto de los consumidores, ya que la gente se apresura a comprar bienes y servicios antes de que los precios suban aún más. Al final, el gasto de los consumidores se ralentizará, ya que esas compras anteriores fueron, en esencia, sacadas del futuro, por lo que el gasto futuro de los consumidores será menor de lo que habría sido de otro modo.

Fig. 7 - Desplazamiento de la oferta agregada hacia la izquierda

Como puedes ver en la Tabla 1, el impacto de una recesión en el gasto de los consumidores ha variado durante las seis últimas recesiones en Estados Unidos. Por término medio, el impacto ha sido un descenso del 2,6% en los gastos de consumo personal^.1 Sin embargo, eso incluye el descenso muy grande y rápido durante la breve recesión de 2020 debido a la paralización de la economía mundial cuando el COVID-19 conmocionó al mundo. Si eliminamos ese valor atípico, el impacto ha sido sólo ligeramente negativo.

En resumen, es posible tener una recesión sin que se produzca un gran descenso, o incluso ninguno, del gasto de los consumidores. Todo depende de lo que haya causado la recesión, de lo larga y grave que los consumidores esperen que sea, de lo preocupados que estén por la pérdida de ingresos personales y de empleo, y de cómo reaccionen a ella con sus carteras.

Tabla 1. Impacto de la recesión en el gasto de los consumidores entre 1980 y 2020^.1

Gráfico del gasto de los consumidores

Como puedes ver en la Figura 8. a continuación, el gasto de los consumidores tiene una fuerte correlación con el PIB en Estados Unidos. Sin embargo, el gasto de los consumidores no siempre ha disminuido durante una recesión. La causa de una recesión determina cómo reaccionarán los consumidores ante un descenso del PIB, y los consumidores a veces pueden ser la causa de una recesión, ya que retraen el gasto en previsión de la caída de los ingresos personales o de la pérdida de empleo.

Está claro que el gasto en consumo personal disminuyó notablemente durante la Gran Recesión de 2007-2009 y durante la recesión inducida por la pandemia de 2020, que supuso un desplazamiento masivo y rápido hacia la izquierda de la curva de demanda agregada debido a los bloqueos impuestos por el gobierno en toda la economía. El gasto de los consumidores y el PIB repuntaron en 2021, cuando se levantaron los bloqueos y la economía volvió a abrirse.

Fig. 8 - PIB y gasto de los consumidores en EEUU. Fuente: Oficina de Análisis Económico

En el gráfico siguiente (Figura 9), puedes ver que el gasto de los consumidores no sólo es el mayor componente del PIB en Estados Unidos, sino que su parte del PIB ha ido aumentando con el tiempo. En 1980, el gasto de los consumidores representaba el 63% del PIB. En 2009 había subido al 69% del PIB y se mantuvo en torno a este rango durante varios años antes de saltar al 70% del PIB en 2021. Algunos factores que conducen a una mayor proporción del PIB incluyen la llegada de Internet, más compras en línea, y la globalización, que hasta hace poco ha mantenido los precios de los bienes de consumo bajos y, por tanto, más asequibles.

Fig. 9 - Porcentaje del gasto de los consumidores estadounidenses en el PIB. Fuente: Oficina de Análisis Económico

1. Fuente: Oficina de Análisis Económico(Datos Nacionales-PIB e Ingresos Personales-Sección 1: Producto Interior y Renta-Tabla 1.1.6)