Saltar a un capítulo clave
Entender el Tipo de Interés Negativo
No todos los aspectos de la economía tienen que ver con el crecimiento. En este apasionante reino de la macroeconomía, podrías tropezar con un concepto que parece poco ortodoxo pero que es crucial para comprender las políticas financieras en general. Tienes razón, se trata de los Tipos de Interés Negativos. La mera idea de un tipo de interés negativo puede resultar alucinante, pero adentrémonos en este fascinante tema para tener una idea más clara.
¿Qué son los Tipos de Interés Negativos?
Un debate sobre el tipo de interés negativo seguro que te atraerá y cuestionará los principios que hayas estudiado sobre préstamos y empréstitos. En los términos más sencillos, una política de tipos de interés negativos (PIIN) es una medida en la que los bancos centrales fijan los tipos de interés nominales por debajo de cero. Te estarás preguntando, ¿cómo funciona eso?
Política de tipos de interés negativos (PIIN): Herramienta de política monetaria en la que los tipos de interés nominales se fijan con un valor negativo.
Convencionalmente, los depositantes ganan intereses por sus depósitos bancarios, mientras que los prestatarios pagan intereses por sus préstamos. Con el tipo de interés negativo, este escenario cambia. A los depositantes se les cobra por mantener el dinero en el banco, y los prestatarios reciben intereses o devuelven menos de lo que piden prestado. Esta medida la adoptan los bancos centrales en épocas críticas para fomentar el gasto y la inversión por encima del ahorro, con el fin de estimular el crecimiento económico.
- Los tipos de interés nominales se fijan por debajo de cero
- Los depositantes pagan al banco por guardar su dinero
- Los prestatarios reciben intereses o devuelven menos de lo que piden prestado
Comparación de tipos de interés positivos y negativos
¿Cómo se ve el mundo con tipos de interés positivos y negativos? Altera por completo la forma en que percibes el ahorro y el gasto.
En una economía dominada por los tipos de interés positivos, si depositas 100€ en tu cuenta bancaria que ofrece un tipo de interés anual del 5%, te encontrarás con 105€ al final del año. Por el contrario, en el mundo de los tipos de interés negativos, con un tipo de interés del -5%, sólo encontrarías 95€ al final del año.
La tabla siguiente te ayuda a comparar cómo afectan los tipos de interés, positivos o negativos, a tus ahorros y préstamos:
Tipo de interés positivo | Tipo de interés negativo | |
Ahorro | Se acumula con el tiempo | Se pierde con el tiempo |
Endeudamiento | Devuelve más de lo prestado | Devuelve menos de lo prestado o gana intereses |
Orígenes de los tipos de interés negativos
El concepto de tipos de interés negativos no es nuevo. Los economistas llevan años debatiéndolo. Sin embargo, no fue hasta después de la crisis financiera de 2008 cuando los bancos centrales empezaron a aplicar tipos de interés negativos para estimular las economías y combatir la inflación.
Entre los bancos centrales que primero introdujeron los tipos de interés negativos estuvo el Riksbank sueco en 2009, seguido por el Banco Central Europeo en 2014. Aplicaron esta herramienta de política monetaria no convencional en respuesta a la caída de los precios y al lento crecimiento económico.
Comprender el cómo y el porqué de los tipos de interés negativos ayuda a desentrañar escenarios económicos complejos y te acerca un paso más al dominio de la macroeconomía.
Aspectos funcionales del tipo de interés negativo
Pelar las capas del tipo de interés negativo puede ofrecer una comprensión transparente de su funcionalidad. Como cambio drástico respecto a las normas financieras convencionales, comprender sus entrañas es crucial. Esta sección desentrañará cómo funciona, el papel de los bancos y los prestatarios, y un ejemplo digerible para obtener una comprensión más completa.
¿Cómo funcionan los tipos de interés negativos?
¿Cómo es posible que prestes dinero y te devuelvan menos? Sí, parece paradójico, pero el funcionamiento de los tipos de interés negativos se basa precisamente en este principio. Es una política monetaria no convencional utilizada por los bancos centrales para estimular la economía en épocas de graves recesiones económicas o periodos deflacionistas.
Veamos cómo funciona:
- Un banco central aplica una política de tipos de interés negativos, lo que significa que cobra a las instituciones financieras por mantener reservas.
- Las instituciones financieras, principalmente los bancos, trasladan el coste a sus clientes cobrándoles por mantener depósitos. Por tanto, esencialmente estás pagando por ahorrar.
- Al mismo tiempo, estos bancos conceden préstamos a tipos en los que los prestatarios, de hecho, reciben dinero. Así, en lugar de pagar intereses, los prestatarios ganan al pedir un préstamo.
- El objetivo principal es desincentivar el ahorro y fomentar el gasto y la inversión, dando así un impulso a la economía.
El papel de los bancos en los tipos de interés negativos
Los bancos desempeñan un papel fundamental en la aplicación y el funcionamiento de los tipos de interés negativos. En circunstancias normales, los bancos ganan con los intereses que pagan los prestatarios y pagan intereses a los depositantes, al tiempo que obtienen un beneficio del diferencial de tipos de interés o del diferencial. Sin embargo, durante los tipos de interés negativos, este modelo operativo se invierte.
Cuando a las instituciones financieras se les cobra por mantener reservas en el banco central, trasladan este coste a sus clientes. En consecuencia, los titulares de depósitos se ven obligados a pagar intereses en lugar de beneficiarse de ellos. ¿Por qué? Porque los bancos desincentivan el ahorro para aumentar el gasto y las inversiones.
Por otro lado, los bancos prestan a tipos que permiten a los prestatarios devolver menos de lo que pidieron prestado. Esta situación puede parecer deficitaria, los bancos cubren sus costes con las comisiones que cobran por prestar servicios de préstamo.
La perspectiva del prestatario sobre los tipos de interés negativos
Desde la perspectiva de un prestatario, los tipos de interés negativos equivalen a un paraíso financiero, ya que sale ganando en lugar de perdiendo. En lugar de preocuparse por la acumulación de intereses a lo largo del tiempo, los prestatarios se sorprenden gratamente al comprobar que su deuda se reduce con el tiempo.
Por ejemplo, si pides prestados 1.000 £ a un banco que cobra un tipo de interés negativo del -2%, al final del año sólo deberás al banco 980 £, contrariamente al modelo tradicional en el que habrías debido más.
Como resultado, los prestatarios podrían verse tentados a pedir más préstamos debido a estas atractivas condiciones. No obstante, es crucial recordar la razón que subyace a la aplicación de esta política: estimular el crecimiento económico. Por tanto, se anima a los prestatarios a invertir este dinero prestado en actividades empresariales, inversión inmobiliaria u otras actividades generadoras de economía.
- A los prestatarios se les paga por pedir préstamos
- El importe principal disminuye con el tiempo
- Los préstamos fomentan las actividades económicas
Ejemplo de tipo de interés negativo para una mejor comprensión
Pongamos un ejemplo hipotético para comprender mejor los mecanismos de los tipos de interés negativos. Imagina un ficticio Banco central X que aplica tipos de interés negativos del -0,5%. He aquí una breve explicación de cómo funcionarían las cosas:
Juan mantiene una cuenta de ahorro de 1000€ en el Banco A. Según la nueva política, el banco cobra un 0,5% como tipo de interés. Al final del año, el saldo de la cuenta de ahorro de Juan sería de 950 £. Al mismo tiempo, si Sue pide un préstamo de 1000 £ al Banco A, sólo tendría que devolver 950 £ al banco al final del año. Así pues, los tipos de interés negativos alteran las funciones esenciales de los bancos e influyen en el comportamiento de gasto y ahorro de los particulares.
Sin duda, los tipos de interés negativos ponen patas arriba el concepto tradicional de banca. Pero recuerda que no es una medida rutinaria. Es una herramienta que se utiliza en momentos de graves dificultades económicas para dinamizar la atonía de la economía fomentando el endeudamiento y disuadiendo el ahorro. Sin embargo, los efectos a largo plazo de esta política siguen siendo un tema muy debatido entre los economistas.
Las secuelas de los tipos de interés negativos
Las repercusiones de los tipos de interés negativos van mucho más allá de los bancos y los clientes. Desempeñan un papel enorme en la narrativa económica general, sobre todo después de entrar en el territorio negativo. Ayudadas por su seductor encanto de "más gasto, menos ahorro", las principales secuelas giran principalmente en torno al despertar económico. Pero como pronto descubrirás, no todo es tan de color de rosa como parece.
Efectos de los tipos de interés negativos
Los tipos de interés bajo cero presentan una serie de intrincadas ramificaciones. Tanto si se trata de una secuela inmediata como de un efecto dominó a largo plazo, estas repercusiones se dejan sentir con fuerza en las distintas partes interesadas de la economía. Desde los clientes de a pie hasta los grandes inversores, desde los solicitantes de préstamos hasta las empresas, los efectos de los tipos de interés negativos se extienden a todos los estratos de la economía.
Consecuencias inmediatas de los tipos de interés negativos
En cuanto se ponen en marcha los tipos de interés negativos, se produce una cadena de consecuencias inmediatas. El impacto más visible es el empujón hacia las inversiones de riesgo. Dado que los tipos de interés negativos mastican el valor de tus ahorros, es probable que transfieras tu dinero de los ahorros a vías de inversión más lucrativas, aunque más arriesgadas.
- Aumento de las inversiones en acciones y valores
- Mayor asunción de riesgos
- Aumento de la inversión empresarial
- Aumento del gasto de los consumidores
Paralelamente, se produce un repunte de los préstamos, lo que estimula el aumento del gasto de los consumidores y de la inversión empresarial. Este estímulo monetario es precisamente el resultado que los bancos centrales desean conseguir con la aplicación de tipos de interés negativos.
Por ejemplo, si el Banco A decreta un tipo de interés negativo del -2%, los clientes se inclinarían por retirar sus depósitos e invertir en acciones, propiedades u otras empresas rentables para evitar que su dinero se erosione en el banco. El concesionario de coches B, al ver estas políticas, podría decidir pedir prestado al banco para ampliar sus operaciones, sabiendo que en realidad devolverá menos de lo que pide prestado, facilitando así el crecimiento económico.
Repercusiones a largo plazo de los tipos de interés negativos en la economía
Si hablamos de las repercusiones a largo plazo, los tipos de interés negativos pueden cambiar las reglas del juego de las economías durante un periodo prolongado. Aparte de la escalada del endeudamiento y el aumento de las inversiones de riesgo, los tipos de interés negativos pueden tener profundas implicaciones para la inflación y la estabilidad económica general.
- La reducción de los márgenes bancarios puede conducir a una mayor inestabilidad financiera
- Aumento de los precios de los activos que provoque burbujas de activos
- La inflación puede controlarse si se gestiona eficazmente
La ingesta continua de tipos de interés negativos podría afectar negativamente a la rentabilidad y la estabilidad financiera de los bancos. Además, la abundancia de liquidez puede disparar los precios de los activos y, por tanto, cultivar la posibilidad de burbujas de activos. La inflación, sin embargo, puede gestionarse más eficazmente con el aumento del gasto y la actividad económica, a menos que la economía se recaliente.
Tipos de interés negativos y crecimiento económico
En un entorno dotado de tipos de interés negativos, el guión de la narrativa del crecimiento económico es más intrigante. Como el crecimiento económico descansa en el delicado equilibrio del gasto, el ahorro, la inversión, el consumo y la confianza, el juego de los tipos de interés negativos sobre estos pilares puede dar forma a cómo se expande o se contrae la economía con el tiempo.
Tipos de Interés Negativos: ¿Un estímulo para el crecimiento económico?
¿Puede la aplicación de tipos de interés negativos servir de tónico para impulsar el crecimiento económico? La impresión a primera vista es un rotundo sí. Dado que esta herramienta monetaria no convencional desincentiva el atesoramiento de dinero en el banco y, en su lugar, motiva a particulares y empresas a invertir o consumir, el aumento de la demanda agregada puede estimular el crecimiento económico.
Esta proposición se resume en la fórmula [Crecimiento económico (Y) = Gasto del consumidor (C) + Inversiones (I) + Gasto público (G) + Exportaciones netas (NX)].
En teoría, un aumento del gasto de los consumidores (C) y de las inversiones (I) debido a los tipos de interés negativos debería impulsar el crecimiento económico (Y).
Retos para el crecimiento económico debido a los tipos de interés negativos
Aunque en teoría los tipos de interés negativos pueden catalizar el crecimiento económico, también conllevan algunos obstáculos innegables. La principal preocupación reside en el sector bancario. Al caer la rentabilidad de los bancos debido a la reducción de los márgenes de interés, su capacidad para conceder préstamos podría verse comprometida. Esto puede acabar provocando una grave inestabilidad financiera, perjudicando a la estructura económica en general.
- Rentabilidad bancaria comprometida
- Deterioro de la estabilidad financiera
- Riesgo de recalentamiento de la economía
Además, el aumento del gasto de los consumidores y las empresas también puede provocar un recalentamiento de la economía, con la consiguiente escalada de la inflación. A menos que se mantenga bajo control, este aumento de la inflación puede borrar los efectos beneficiosos de los tipos de interés negativos. Por lo tanto, la narrativa del crecimiento económico bajo tipos de interés negativos está teñida de matices tanto de potencial alcista como de considerable cautela.
Tipos de interés negativos - Puntos clave
- La Política de Tipos de Interés Negativos (PNIR) es una herramienta de política monetaria en la que los tipos de interés nominales se fijan por debajo de cero.
- Con tipos de interés negativos, se cobra a los depositantes por mantener el dinero en el banco, y los prestatarios reciben intereses o devuelven menos de lo que piden prestado.
- Los tipos de interés negativos fueron aplicados por primera vez tras la crisis financiera de 2008 por el Riksbank sueco en 2009, y por el Banco Central Europeo en 2014.
- Las consecuencias inmediatas de los tipos de interés negativos incluyen el aumento de las inversiones de riesgo, una mayor asunción de riesgos, un incremento de la inversión empresarial y un aumento del gasto de los consumidores.
- Los efectos a largo plazo de los tipos de interés negativos incluyen la posible inestabilidad financiera de los bancos, el aumento de los precios de los activos que conduce a burbujas de activos y el posible control de la inflación.
Aprende con 12 tarjetas de Tasa de interés negativa en la aplicación StudySmarter gratis
¿Ya tienes una cuenta? Iniciar sesión
Preguntas frecuentes sobre Tasa de interés negativa
Acerca de StudySmarter
StudySmarter es una compañía de tecnología educativa reconocida a nivel mundial, que ofrece una plataforma de aprendizaje integral diseñada para estudiantes de todas las edades y niveles educativos. Nuestra plataforma proporciona apoyo en el aprendizaje para una amplia gama de asignaturas, incluidas las STEM, Ciencias Sociales e Idiomas, y también ayuda a los estudiantes a dominar con éxito diversos exámenes y pruebas en todo el mundo, como GCSE, A Level, SAT, ACT, Abitur y más. Ofrecemos una extensa biblioteca de materiales de aprendizaje, incluidas tarjetas didácticas interactivas, soluciones completas de libros de texto y explicaciones detalladas. La tecnología avanzada y las herramientas que proporcionamos ayudan a los estudiantes a crear sus propios materiales de aprendizaje. El contenido de StudySmarter no solo es verificado por expertos, sino que también se actualiza regularmente para garantizar su precisión y relevancia.
Aprende más