Política de Bienestar Social

Tipos de políticas de bienestar social

Hay varios tipos de políticas de bienestar social para cubrir las distintas necesidades de las personas y las familias de todo el país. La alimentación, la vivienda, el cuidado de los niños y la atención médica son algunas de las áreas que cubren las políticas de bienestar social.

Políticas sociales de vivienda

Las políticas sociales de vivienda ayudan a las personas a evitar quedarse sin hogar u otros tipos de inseguridad en la vivienda. Pueden ir acompañadas de beneficios adicionales, como formación laboral y oportunidades de empleo.

En 2020, el Tesoro de EEUU impulsó el Programa de Ayuda de Emergencia al Alquiler (ERAP) para mantener a las familias en sus hogares mientras se recuperaban de las repercusiones económicas de la pandemia de COVID-19^.2 Los cierres forzosos obligaron a las empresas a cerrar, por lo que mucha gente perdió su trabajo y la inseguridad de la vivienda se convirtió en un problema.

A medida que más personas se endeudaban por el alquiler y se enfrentaban al desahucio, el ERAP puso a disposición fondos para ayudar a las familias a hacer frente a sus obligaciones de alquiler y servicios públicos. El gobierno federal suspendió el desahucio en las ciudades donde los inquilinos no podían pagar a sus caseros. Sin embargo, no quedó claro quién tendría la responsabilidad de pagar. El gobierno federal colaboró entonces con los estados y las autoridades locales para ofrecer ayuda a los propietarios y a los proveedores de servicios públicos.

Figura 1. - Familia en un hogar

Asistencia sanitaria

Las políticas sociales de asistencia sanitaria ayudan a las personas a acceder a la asistencia sanitaria con un coste mínimo o nulo. Estos programas están diseñados para mejorar el bienestar social y apoyar una mano de obra productiva. Un tipo de iniciativa sería el Programa de Seguro Médico Infantil (CHIP), destinado a proporcionar asistencia médica a los niños de familias pobres.

Como la asistencia sanitaria es una industria principalmente privada en Estados Unidos y la mayoría de la gente depende de su trabajo para tener seguro médico, y el seguro privado puede tener un coste mensual elevado, muchas familias en situación de desempleo dependen de la asistencia sanitaria del gobierno para cubrir sus necesidades médicas.

Para garantizar una sociedad sana y productiva, un programa como Medicaid facilita que las personas cumplan los requisitos en función de sus ingresos y del tamaño de su familia. Los beneficiarios no suelen pagar una franquicia cuando necesitan atención médica. A través de este programa, el gobierno cubre el coste de la atención.

Ayuda al Desempleo

La Ayuda al Desempleo proporciona ayuda económica a los desempleados para que puedan sobrevivir en tiempos difíciles y encontrar trabajo. Cuando se trata de abordar las desigualdades de ingresos y el desempleo entre las personas mayores con ingresos bajos y las personas con discapacidad, las publicaciones del programa de Seguridad de Ingreso Suplementario indican que los pagos a partir de 2020 fueron de 783 $ al mes (1.175 $ para parejas) y compensaciones para ayudar a las personas a cubrir necesidades básicas como alimentos, ropa y alojamiento^.3 El Tesoro de EE.UU. paga estas prestaciones.

Ejemplos de políticas de bienestar social

Algunos ejemplos de políticas específicas de bienestar social son el Programa de Vales de Elección de Vivienda, Medicaid y Medicare, la asistencia nutricional y la Seguridad Social.

Programa de Vales de Elección de Vivienda

El Programa de Vales para Elección de Vivienda, también conocido como Sección 8, ayuda a las familias que cumplen los requisitos a pagar el alquiler. La familia puede elegir su propia vivienda siempre que ésta cumpla los requisitos establecidos por el gobierno y el propietario acepte la Sección 8. La forma en que funciona es que el beneficiario paga la cantidad que se considera adecuada para su nivel de ingresos, y el gobierno cubre el resto. De este modo, las personas con bajos ingresos pueden permitirse una vivienda, y los propietarios pueden seguir cobrando el precio de mercado del alquiler.

Medicaid y Medicare

Medicaid es un ejemplo de programa sanitario financiado por el Estado para familias y niños con bajos ingresos, basado en la renta. Los ingresos máximos permitidos a los solicitantes y beneficiarios quedan a discreción del gobierno de cada estado. Tampoco todos los proveedores médicos deben aceptar esta forma de seguro.

Medicare es un ejemplo de programa sanitario financiado por el gobierno federal que proporciona seguro médico a los mayores de 65 años. Se hacen algunas excepciones en circunstancias especiales para las personas que están por debajo del requisito de edad, como es el caso de algunas discapacidades.

Asistencia alimentaria

Muchas personas con bajos ingresos reciben cupones de alimentos, también conocidos como Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP). Esta transferencia social beneficia a las familias con bajos ingresos que utilizan estos cupones para comprar alimentos. Tus ingresos brutos mensuales tienen que estar por debajo del 130% del umbral federal de pobreza para tener derecho a estas prestaciones sociales. El gobierno calcula cuánto gastarían en comida las familias que cumplen los requisitos en su respectiva localidad y les envía una cantidad menos el 30% de sus ingresos mensuales.

Seguridad Social

La Seguridad Social es un programa federal de pensiones al que cotizan los trabajadores durante sus años de trabajo en forma de impuestos de la Seguridad Social. Éstos se retiran directamente de sus nóminas antes de ingresar el dinero en sus cuentas bancarias. Después, cuando los trabajadores alcanzan la edad de jubilación especificada, tienen derecho a cobrar esos fondos como pensión.

Bienes públicos

Un bien público es un servicio o una mercancía que se presta en beneficio de la sociedad sin coste alguno y es accesible a todos. Un bien público puede ser proporcionado por particulares o por el gobierno. Las políticas de bienestar social también benefician a los ciudadanos, por lo que las políticas que cubren bienes públicos como las infraestructuras y la educación pública son importantes para mantener la equidad y la igualdad en una sociedad.

Infraestructuras

Las políticas de infraestructuras proporcionan un mecanismo de apoyo a un estilo de vida saludable, seguridad, transporte público, instalaciones recreativas, servicios sanitarios y escuelas.

Cuando los planificadores urbanos preparan proyectos de infraestructuras como parques urbanos, carriles bici, aceras y senderos, extienden los beneficios sanitarios y sociales. Los planificadores urbanos tienen que preocuparse por la salud de su comunidad, porque los creadores de empleo se preguntarán cuál será el coste de la asistencia sanitaria o cuánto aumentará la tasa de absentismo.

Las autoridades urbanísticas tienen publicaciones que demuestran que cuantos más espacios abiertos y parques urbanos tenga una ciudad, más sana será la comunidad^.4 Este resultado se consigue cuando los habitantes de la ciudad tienen libre acceso a los espacios abiertos y libre acceso al ocio. El acceso ilimitado proporciona muchos beneficios, desde hacer ejercicio hasta correr, montar en bicicleta, practicar yoga, etc. El aumento de la transitabilidad a pie es la receta número uno que el Centro de Control de Enfermedades recomienda a las ciudades para combatir la epidemia de obesidad.

Los datos estadísticos del gasto nacional indican que en 2020 el gasto sanitario de EE.UU. fue de aproximadamente 4,1 billones de dólares o 12.530 dólares per cápita^.5 Las publicaciones científicas han demostrado que un paseo por la naturaleza o por un parque público tiene un efecto positivo mensurable sobre nuestra ansiedad y estrés. La gente hace ejercicio y disfruta de enormes beneficios para la salud que las ciudades extienden a sus habitantes.

La mayoría de las ciudades que se construyen en torno al automóvil tienden a tener importantes problemas de obesidad y costes sociales, ya que el sistema sanitario se ve sobrecargado por sus necesidades sanitarias. Por el contrario, los programas locales de beneficios sociales que invierten en parques y senderos urbanos tienen datos estadísticos que indican que por cada dólar que gastan en parques y senderos, la ciudad ahorra 3 dólares en gastos sanitarios^.6

Educación pública

Las instituciones de educación pública como las escuelas públicas, los colegios comunitarios y las universidades estatales son ejemplos de infraestructuras financiadas por el gobierno que benefician a la sociedad. Las escuelas públicas imparten educación a los niños desde la guardería hasta el 12º curso, con un plan de estudios curricular destinado a proporcionarles los conocimientos básicos que necesitan. Los colegios comunitarios y las universidades estatales de Estados Unidos sí exigen que los estudiantes paguen la matrícula, pero a un precio reducido en comparación con las universidades privadas. Esto es posible porque las escuelas estatales reciben financiación del gobierno estatal.

La ayuda para la matrícula en forma de Solicitud Gratuita de Ayuda Federal para Estudiantes (FAFSA), comúnmente conocida como ayuda económica, es un programa federal que ayudará a pagar la matrícula universitaria basándose en factores como los ingresos de los padres, los bienes, los ingresos personales y los niveles académicos.

Beneficios de la política de bienestar social

La política de bienestar social lleva asociados tanto beneficios como problemas. Dado que la situación de cada ciudadano es única, puede resultar difícil idear políticas que incluyan y sean capaces de satisfacer las necesidades de todos. Además, las naciones pueden enfocar las políticas de bienestar social de dos formas distintas. Pueden optar por un enfoque residual, como en Estados Unidos, o por un enfoque institucional, que es más frecuente en los países europeos.

Beneficios de la política de bienestar social

Los tipos de prestaciones que proporcionan los programas sociales son los siguientes

• Alimentos
• Asistencia sanitaria
• Vivienda
• Atención infantil

Además de lo que proporcionan los programas de bienestar social, también podemos preguntarnos cómo benefician estas políticas a una sociedad. Una de las razones es proteger a los ciudadanos que son temporal o permanentemente incapaces de contribuir a la sociedad. Esto puede incluir a los pobres, los sin techo, los parados, los heridos o los discapacitados. Otra forma en que las políticas de bienestar social benefician a la sociedad es ayudando a reducir la desigualdad en la sociedad. Si un país puede aliviar la preocupación de sus ciudadanos por la supervivencia diaria y proporcionarles servicios, la gente podrá permanecer más tiempo en la escuela, permitirse alimentos más nutritivos y acceder a la asistencia sanitaria.

Problemas de la política de bienestar social

Algunos problemas asociados a las políticas de bienestar social se derivan de que las cualificaciones de los beneficiarios son incoherentes y discriminatorias en los distintos programas. No existe un nivel de ingresos estándar necesario para recibir ayudas. Cada programa puede determinar sus propios tramos de ingresos para decidir cuánta ayuda se presta a cada solicitante.

Los programas de asistencia social también tienen que lidiar con otros requisitos para recibir ayuda. El número de hijos de una familia, las familias monoparentales, la situación matrimonial, la edad, los problemas de salud preexistentes, la capacidad para trabajar y los bienes que se tienen pueden influir en la cantidad de ayuda que se recibe. Por ejemplo, si alguien ha heredado una casa pero está discapacitado, no puede trabajar y tiene ingresos limitados, puede que no tenga derecho a la ayuda a menos que venda la casa. Sin embargo, entonces deberá buscar otro lugar donde vivir y pagar un alquiler, lo que le sumirá aún más en la pobreza.

Un enfoque residual de la política de bienestar social

El enfoque residual de la política de bienestar social es el método por el cual la intervención pública sólo se produce cuando se agotan los recursos de los individuos, las comunidades locales y el mercado. Piensa en ello como una red de seguridad para la sociedad. Un enfoque residual es diferente de un enfoque institucional, en el que las prestaciones sociales se proporcionan continuamente de forma universal sin restricciones en torno al nivel de ingresos que se permite tener a los beneficiarios.

Los programas que se desarrollan con un enfoque residual suelen estar restringidos a los pobres y se retiran una vez que el beneficiario reúne los requisitos para recibir ayudas en otro lugar o aumenta lo suficiente sus ingresos. Algunos programas pueden limitar el tiempo durante el que se pueden cobrar las prestaciones, independientemente del nivel de ingresos o de la disponibilidad de otras ayudas.