¿Son los reactores de sal fundida más seguros que los reactores nucleares tradicionales?
Sí, los reactores de sal fundida son considerados más seguros debido a su diseño inherente que permite la gestión pasiva del calor residual, así como su capacidad para operar a presión atmosférica, reduciendo el riesgo de explosiones y escapes radiactivos en comparación con los reactores nucleares tradicionales.
¿Cómo funcionan los reactores de sal fundida?
Los reactores de sal fundida funcionan utilizando sales fundidas como combustible y como refrigerante. El combustible fisible se disuelve en la sal líquida, circulando a través de un núcleo donde ocurre la fisión nuclear. El calor generado calienta un circuito de transferencia térmica que genera vapor para accionar una turbina eléctrica. Estos reactores pueden operar a alta temperatura y presión atmosférica, mejorando así la eficiencia y seguridad.
¿Cuáles son las ventajas de los reactores de sal fundida sobre otros tipos de reactores nucleares?
Los reactores de sal fundida ofrecen mayor seguridad al operar a presión atmosférica, reducen el riesgo de fusión del núcleo, permiten usar combustible de forma más eficiente y generan menos residuos radiactivos de larga vida. Además, pueden utilizar torio como combustible, que es más abundante y accesible.
¿Cuáles son los desafíos técnicos involucrados en el desarrollo de reactores de sal fundida?
Los desafíos técnicos incluyen la corrosión de materiales debido a las altas temperaturas y la naturaleza corrosiva de las sales, el manejo seguro de materiales radiactivos en estado líquido, el desarrollo de nuevas aleaciones resistentes, y la gestión eficaz de los productos de fisión y desechos radiactivos.
¿Cuál es el impacto ambiental de los reactores de sal fundida?
Los reactores de sal fundida tienen un impacto ambiental potencialmente reducido en comparación con los reactores nucleares tradicionales. Generan menos residuos radiactivos de larga duración, tienen mayor eficiencia de combustible y son más seguros en caso de fallos. Además, pueden utilizar actínidos menores, disminuyendo la cantidad de desechos peligrosos. Sin embargo, su desarrollo y gestión siguen requeridos para minimizar cualquier riesgo.