¿Qué es la Geofísica Aplicada?
La Geofísica Aplicada es la rama de la geofísica que utiliza métodos físicos para estudiar la estructura y composición de la Tierra, con el objetivo de resolver problemas específicos como la búsqueda de recursos naturales, la evaluación de riesgos geológicos y la ingeniería civil.
¿Qué aplicaciones tiene la Geofísica Aplicada en la exploración de recursos naturales?
La Geofísica Aplicada se utiliza en la exploración de recursos naturales para identificar y mapear yacimientos de minerales, petróleo, gas y aguas subterráneas. Emplea métodos como la sísmica, gravimetría, magnetometría y resistividad eléctrica para detectar anomalías geológicas que indican la presencia de estos recursos.
¿Cuáles son las técnicas más comunes utilizadas en Geofísica Aplicada?
Las técnicas más comunes en Geofísica Aplicada son la sísmica de reflexión y refracción, la gravimetría, el magnetometría, el radar de penetración terrestre (GPR) y la resistividad eléctrica. Estas técnicas ayudan a estudiar las propiedades físicas del subsuelo y detectar características geológicas y estructuras.
¿Cuál es la importancia de la Geofísica Aplicada en la ingeniería civil?
La Geofísica Aplicada es crucial en la ingeniería civil porque permite la identificación y evaluación de las condiciones subterráneas sin necesidad de excavaciones extensivas. Ayuda a detectar fallas geológicas, ubicación de recursos y condiciones del suelo, mejorando la seguridad y eficiencia en la planificación y construcción de infraestructuras.
¿Cómo se lleva a cabo un estudio de Geofísica Aplicada?
Un estudio de Geofísica Aplicada se lleva a cabo mediante la utilización de herramientas y técnicas como la sismología, gravimetría, magnetometría y métodos eléctricos para explorar las propiedades físicas del subsuelo. Estos datos se analizan e interpretan para obtener información sobre estructuras geológicas, recursos minerales, o condiciones del terreno.