Demencia

Definición de demencia

Probablemente hayas oído hablar de la demencia, pero ¿sabes qué tipo de enfermedad es?

A medida que envejecemos, nuestras células mueren: es una parte natural del proceso de envejecimiento. Sin embargo, en las personas con demencia, puede ocurrir antes de lo normal y en mayor medida. Cuando las células cerebrales mueren, no vuelven a nacer, lo que deja lagunas en tu memoria y en tu capacidad para hacer cosas como el control motor. La demencia es una enfermedad progresiva, lo que significa que seguirá empeorando; por desgracia, ningún tratamiento puede detener el curso de la demencia.

Fig. 1. ¿Conoces a alguien con demencia?

Entre las enfermedades cerebrales, la demencia es relativamente conocida debido a su prevalencia. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha informado de que unos 55 millones de personas padecen demencia en la actualidad, y el Centro de Control de Enfermedades (CDC) afirma que en Estados Unidos algo menos de seis millones de personas viven actualmente con demencia^{.1 2} Muchas personas pueden vivir con los síntomas de la demencia durante años después de que se les diagnostique, pero su calidad de vida disminuye con el tiempo. Aunque la gente puede vivir con esta enfermedad, la OMS la señala como la séptima causa de muerte entre todas las enfermedades.

La enfermedad de Alzheimer

Es difícil hablar de demencia y no hablar del Alzheimer. Aunque puedas pensar que la enfermedad de Alzheimer y la demencia son enfermedades cognitivas distintas, la enfermedad de Alzheimer es en realidad un tipo de demencia. Aunque hay otros tipos de demencia, el Alzheimer representa aproximadamente el 60-80% de todos los casos de demencia.

El Alzheimer es una enfermedad que desarrollan muchos ancianos, y la Asociación de Alzheimer informa de que uno de cada tres ancianos fallece por Alzheimer u otra forma de demencia. El Alzheimer es progresivo como la demencia, lo que significa que su curso no puede invertirse una vez que se produce.

Además, como la enfermedad de Alzheimer ataca al cerebro, a menudo las personas pueden pasar años con el cerebro cambiado antes de que se noten sus síntomas. El primer síntoma notorio que tienen muchas personas son los problemas de memoria, el síntoma más comúnmente conocido del Alzheimer.

Otros tipos de demencia son

• Demenciavascular: Demencia causada por un daño cerebral o un ictus

• Demenciade cuerpos de Lewy: Una forma de demencia que presenta alucinaciones, problemas de sueño y dificultades de atención

• Demenciafrontotemporal: Un tipo de demencia en la que los lóbulos frontal y temporal experimentan la mayor parte de la pérdida celular, lo que provoca cambios importantes en la personalidad y el juicio

• Demenciamixta: Combinación de dos tipos de demencia a la vez

Síntomas de la demencia

Como ya habrás adivinado, uno de los síntomas principales y más identificativos de la demencia es la pérdida de memoria. También suele ser el primer síntoma perceptible de la demencia.

Hay dos tipos principales de memoria a los que puede afectar la demencia.

Cuando pensamos que las personas con Alzheimer tienen problemas de memoria, solemos pensar en que olvidan su memoria episódica. Aunque el Alzheimer puede afectar primero a la memoria semántica, la pérdida de memoria episódica suele ser más impactante para los seres queridos.

Cuando alguien tiene problemas de memoria semántica, se le puede diagnosticar demencia semántica. Cuando alguien tiene depresión semántica, pierde principalmente la capacidad de comunicarse eficazmente. Siguen siendo capaces de estructurar frases como las personas sin demencia semántica, pero no pueden recordar el significado de las palabras, lo que dificulta la comprensión de sus frases.

Teniendo en cuenta que la demencia es una enfermedad cognitiva, ¿se te ocurren otros síntomas que podrían deberse a la pérdida de células en el cerebro?

Ésta es una lista de los posibles síntomas que puede presentar una persona cuando tiene demencia. Sin embargo, los síntomas que se presentan varían en función de la persona y del tipo de demencia que padezca.

En las primeras fases de la demencia, alguien puede mostrar síntomas leves, pero ninguno de ellos es lo bastante grave como para etiquetarlo de demencia. En este caso, la persona sería diagnosticada de deterioro cognitivo leve (DCL). No todas las personas que padecen DCL llegan a desarrollar demencia, pero es mucho más probable desarrollar demencia si tienes DCL que si no lo tienes.

Etapas de la demencia

Ser olvidadizo es una parte natural del envejecimiento. A medida que una persona sin demencia envejece, se vuelve más olvidadiza, ya que su cerebro también envejece. Sin embargo, ¿cómo trazar la línea entre ser olvidadizo debido al proceso natural de envejecimiento y ser olvidadizo debido a la demencia? Como familiar, ¿cómo sabes cuándo debes preocuparte por los olvidos de un ser querido? Hay siete fases de la demencia a las que debes prestar atención.

No hay deterioro

En la primera fase de la demencia, no hay síntomas que muestren que la persona está realmente en el inicio del desarrollo de la demencia. Si les hicieran un escáner cerebral, mostraría que han tenido cambios cerebrales; sin embargo, nada es visible a simple vista.

Deterioro cognitivo leve

En esta fase, hay cambios muy leves en el comportamiento de la persona. Puede que sea un poco más olvidadiza, pero no de forma que preocupe a sus familiares.

Deterioro Cognitivo Leve

Esta es la etapa a la que se ha hecho referencia anteriormente. Es la etapa más temprana de la demencia en la que los seres queridos de la persona notarán realmente síntomas y cambios de comportamiento. En esta etapa, la persona olvidará cosas más sencillas, como los nombres y dónde colocó los objetos, y le costará más confundirse ante cosas más simples.

Deterioro Cognitivo Moderado

En esta etapa de la demencia, las personas lucharán aún más con la pérdida de memoria. Este nivel de olvido puede dificultar que una persona viva sola, ya que olvidará citas, pagos y a qué hora tiene que ir a trabajar.

Deterioro Cognitivo de Moderado a Grave

Sobre la base de los síntomas de las etapas anteriores, la quinta etapa de la demencia presenta más problemas para la persona. La persona no puede funcionar de forma independiente y olvidará los nombres de sus familiares.

Deterioro Cognitivo Grave

En esta etapa, la persona ya no recordará los nombres de ningún familiar y tendrá dificultades para comunicarse. Sufrirá cambios de humor y de sueño. Además, en esta fase, aunque la gente no puede recordar acontecimientos recientes, todavía puede recordar sucesos de años anteriores.

Declive Muy Grave

En la fase final de la demencia, la persona perderá la capacidad de comunicarse y a menudo ya no podrá formar palabras coherentes. La persona ya no puede andar, comer ni controlar los movimientos de la vejiga. Hay una gran desconexión entre lo que el cuerpo es capaz de hacer y lo que el cerebro puede hacer.

Fig. 2. En las fases finales de la demencia, las personas necesitan ayuda para todo.

Causas de la demencia

No existe una única causa de demencia. Uno de los mayores factores de riesgo de demencia es la edad, y el riesgo de padecerla aumenta drásticamente a partir de los 65 años.

Siempre es importante tener en cuenta los factores de riesgo hereditarios cuando hablamos de enfermedades. Sin embargo, los estudios dicen que la demencia no es una enfermedad verdaderamente hereditaria, lo que significa que no tienes un riesgo mayor si uno de tus padres o abuelos padece demencia (aunque hay algunos casos en los que padres e hijos padecen ambos demencia). En cambio, el Alzheimer sí tiene un componente hereditario.

Otras personas pueden desarrollar demencia de distintas formas, como un ictus. Alguien que haya sufrido una lesión cerebral traumática puede desarrollar demencia más adelante en su vida debido al daño causado al cerebro. Otras pueden desarrollar demencia por Parkinson, una enfermedad en la que el daño de las células nerviosas puede llevar a la degradación del cerebro. Algunos pueden padecer demencia por la enfermedad de Huntington. La enfermedad de Huntington es un trastorno altamente genético que hace que las células nerviosas dejen de funcionar, lo que lleva a que zonas del cerebro pierdan su capacidad de funcionamiento.

Además, décadas de abuso de sustancias pueden hacer que alguien tenga un mayor riesgo de desarrollar demencia más adelante en su vida.

Tratamiento de la demencia

Por desgracia, aún no existe cura para la demencia. Al igual que el Alzheimer, el cáncer y otras dolencias conocidas e incurables, se gastan cientos de miles de dólares en investigar nuevos tratamientos que puedan curar la demencia.

A pesar de que no hay cura, algunos tratamientos para la demencia pueden ayudar a aliviar los síntomas. La medicación es uno de estos tratamientos. Actualmente existen algunas opciones de medicamentos que se pueden tomar, dependiendo de los síntomas o enfermedades subyacentes que tenga la persona. Dado que uno de los síntomas más destacados de la demencia es la pérdida de memoria, estos medicamentos se centran en aumentar los mensajeros químicos del cerebro que ayudan con la memoria.

La terapia ocupacional es otra opción de tratamiento.

Sin embargo, cuando la demencia progresa hasta cierto punto, la terapia ocupacional será inútil y sólo la medicación ayudará con los síntomas.

Prevención de la demencia

Aunque no existe una única causa de demencia, hay recomendaciones para que las personas de mediana edad ayuden a combatir el posible desarrollo de la demencia. Se recomienda mantenerse sano y activo: hacer ejercicio con regularidad, mantener una dieta sana y no fumar para prevenir los casos de demencia causados por un ictus. También se recomienda seguir utilizando el cerebro. Puede ser mediante interacciones sociales, lectura, rompecabezas y juegos de palabras.

Aunque ninguno de estos métodos puede evitar totalmente que alguien desarrolle demencia, pueden ayudar a combatirla para que los síntomas aparezcan más adelante en la vida.